NO HAY DOS PERSONAS IGUALES

By Costennita - febrero 03, 2022

 

Somos piezas de rompecabezas, esperando ese espacio donde podremos encajar.



Hace días L respondió a un tuit que coloqué con una frase que usualmente se usa para tratar de hacernos caer en cuenta de que al terminar una relación estamos perdiendo lo que podría ser lo mejor que nos haya pasado en la vida: "No vas a encontrar otra como yo" y aunque nos pareció gracioso, teniendo en cuenta el contexto en el que se usó la frase, también activó un recuerdo de un ex que tuve en una vida anterior, que me dijo esa misma frase porque aunque yo me sentía amada y valorada (nunca me volví a sentir tan bien con otra persona aunque revisaba hasta lo que vestía y comía), lamentablemente no podía corresponder al sentimiento en la misma medida, ni cumplir con lo que Andy consideraba que era la forma correcta de demostrarle amor (5 lenguajes del amor), fue por eso que decidí terminar con la relación en aquel momento, sabiendo que no éramos felices y no existía posibilidad de serlo en una relación de codependencia y casi rayando en la obsesión.

Actualmente, Andy está en un heromoso matrimonio, con una hermosa, sexy y amorosa mujer que cada día le demuestra su amor y son realmente felices! Pero cuando, en aquel momento, me lanzó la frase como una maldición con tanto dolor y rabia, se me clavó en el corazón y en el pensamiento haciéndome creer que me había equivocado al terminar con esa relación, esperando el momento en que meditara sobre ella y aprendiera la valiosa lección, que les quiero compartir en este post.

Somos seres únicos, realmente no se encuentra una persona igual a otra (ni los gemelos pueden ser tan idénticos). El diseño original de cada uno nos impide ser iguales, pues siempre habrá alguna diferencia que puede ser  pequeña o abismal dependiendo de quien observe.

En lo que respecta a encontrar nuestro lugar en la vida, o media naranja, es lo mismo. Lo que para algunos puede ser un defecto insoportable, para otro puede ser esa virtud que lo ayude a potenciar un talento oculto. Lo que algunos conocen como ayuda idónea. 

Todo depende de la evolución del proceso de sanación de cada uno, podemos encontrar a alguien mejor o peor, entendiendo por mejor, aquella persona que nos ayude a crecer y mejorar hasta encontrar la mejor versión de nosotros mismos.

Cada persona que se ha cruzado en nuestra vida es un maestro destinado a dejarnos una enseñanza que nos encaminará a la evolución y dependiendo de las decisiones que tomemos en determinados momentos y cómo enfrentemos los obstáculos que llegan, avanzaremos o retrasaremos nuestro proceso. 

Al finalizar una relación, cerrar un ciclo, terminar una experiencia o conexión, debemos dar gracias por su presencia en nuestras vidas, la enseñanza que nos deja y la consciencia de que no encontraremos una vivencia exactamente igual en nuestra vida. Sabiendo que quizá reconozcamos en otros, algunos patrones de ese comportamiento en el futuro, pero al haber vivído la experiencia previa, tendremos la oportunidad de decidir lo que consideramos mejor para nosotros (repetir o evitar). En algunos casos,  nos sentimos atraídos a repetir vivencias porque no hemos aprendido bien la lección que nos permitirá evolucionar, para esto es el autoconocimiento y autovaloración, evitando el apego, o la codependencia. 

Pero al final, somos piezas de un rompecabezas esperando ese espacio donde podremos encajar a la perfección, también llamados círculos íntimos, donde seremos valorados por lo que realmente somos, no por lo que la sociedad hizo de nosotros.

 

AUNQUE TENGAMOS COSAS EN COMÚN, NO SOMOS IGUALES;
TODOS SOMOS VALIOSOS,
TODOS SOMOS PERFECTOS,
TODOS TENEMOS UN GRAN POTENCIAL PARA LO BUENO Y LO MALO,
TODOS MERECEMOS AMAR Y SER AMADOS.

SOLAMENTE NECESITAMOS ESTAR CON LA PERSONA ADECUADA,
 Y EVITAR JUGAR O SEMBRAR HERIDAS INNECESARIAS
EN LOS CORAZONES DE QUIENES NOS AMAN
(para no tener que pagar las consecuencias más tarde)



  • Compartir en:

You Might Also Like

0 comentarios